El principal argumento en favor de hacer esto es que: la evaluación mejora el cálculo; ya que le da a este las bases sobre qué tiene que buscar y cuales resultados deberán ser desechados. Un ejemplo sencillo: si evaluamos que tenemos una gran ventaja en la posición inicial, deberemos descartar todas las líneas de nuestro calculo que nos lleven a una posición igualada o con apenas una leve ventaja a nuestro favor. En este caso sabríamos que estamos buscando una variante o línea que nos asegure, al menos, tanta ventaja como nuestra evaluación nos ha dicho que poseemos.
Nota: Claro que, en algunas oportunidades, puede darse el caso de que no seamos capaces de encontrar una variante o línea que nos de como resultado lo que la evaluación inicial nos puso a buscar. En dichos caso pueden pasar dos cosas: a) que se nos este escapando algún recurso oculto que no somos capaces de ver; b) que hayamos evaluado mal la posición inicial; en este caso deberemos reevaluarla de acuerdo a lo que hemos encontrado.
Veamos como funcionaría esto con el diagrama de nuestro interés:
Juegan las Blancas
Si bien podríamos empezar a mirar uno por uno todos los factores que juegan un rol para la evaluación de esta posición, un jugador con más experiencia raramente hace esto. Él rápidamente se fijará en los factores distintivos, en este caso en particular le llamará la atención la situación del rey negro, aún en el centro, y la ventaja en desarrollo que posee el blanco. Como no parece haber nada importante por parte del negro que compense este hecho él dará preferencia a la posición del primer jugador. Esto es, dirá que el blanco tiene ventaja aunque deberá tener en cuenta que ambos factores que ha considerado como favorables al blanco tienen un carácter temporario (si el negro logra jugar Ae7 y 0-0 desaparecerían ambas ventajas al instante).
Resumiendo: el blanco está mejor y su ventaja es de carácter temporal (si no hacemos algo con ella se evaporará).
Bien, ¿esto es todo lo que podemos sacar de la posición antes de empezar a buscar candidatas?
No, aquí vienen en nuestra ayuda la inmensa experiencia acumulada a través de los libros escritos y análisis de millares de partidas, que nos dicen cuales son las formas típicas de explotar este tipo de ventajas. En este caso la "teoría" recomienda intentar abrir la posición, tomar la iniciativa (o sea la creación de amenazas) e incluso nos dice que no temamos hacer algún tipo de sacrificio para lograr estos objetivos. Como se puede apreciar se dan varias pautas. Ahora sí, es hora de entrar a considerar jugadas, prestándoles suma atención a aquellas que cumplan mejor con estos requisitos.
Nota: Si bien parecería que al llegar a este punto y habiendo tenido que considerar todo lo antes expuesto se nos estaría "cayendo la aguja" o dicho de otro modo que esto lleva mucho tiempo, la verdad es que con un poco de entrenamiento esto se hace a una velocidad vertiginosa (se tarda muchísimo más tiempo en explicar el proceso que en el proceso en si mismo).
Le doy una segunda oportunidad de intentar por su cuenta de hacer el ejercicio tras haber leido esto.
Para aquellos que ya lo hicieron les propongo un ejercicio de cálculo: intenten calcular lo máximo que puedan las líneas críticas. Si bien, durante una partida de torneo, no habrá necesidad de llegar hasta más allá de lo necesario para tomar una decisión, en el entrenamiento siempre será útil utilizar cualquier posición compleja para desafiar nuestra capacidad de cálculo.
