jueves, 25 de junio de 2015

Ese "pequeño" extra...

Que en los finales la actividad del rey es un aspecto importantísimo, es hoy por hoy, una de esas cosas de "conocimiento universal", cientos de libros y artículos se han encargado de brindar esta importante noción a los aficionados y ellos lo incorporan a su arsenal de conocimientos cual si se tratase de que la tierra es redonda.
"En los finales, el rey se vuelve la pieza más fuerte del tablero.” Anatoly Karpov
De entre los ejemplos más repetidos por los autores en su a fan de enfatizar la idea de actividad del rey en el final se encuentra la híper famosa partida:

Capablanca,José Raul - Tartakover,S
New York. Movilidad Rey ejercicio, 1924
[Ifrán,Maximiliano]

Juegan las Blancas

"A primera vista no es fácil evaluar las posibilidades de ambos bandos. La torre negra está a punto de invadir la posición enemiga, y las blancas deberán perder al menos un peón. Sin embargo, el rey negro es "malo" y las blancas tienen un fuerte peón g y si el rey blanco pudiera unirse al ataque...." Averbakh

35.Rg3!

Capablanca, jugando para ganar, sacrifica dos peones con el fin de activar su rey!!

35.Td7? sería apretar "el botón de pánico", ante las dificultades e ir en pos de las tablas. 35...Txc3+ 36.Re2 c6 37.Txa7 Tc4 38.Rd3 c5.

35...Txc3+ 

Juegan las Blancas


36.Rh4! Tf3 37.g6!

Lo más preciso, ya que gana un tiempo.

Posiblemente 37.Rh5 también era suficiente.

37...Txf4+ 38.Rg5 Te4

38...Txd4 39.Rf6 Re8 40.Th8+ Rd7 41.Rxf5+–; 

38...Tg4+ 

Diagrama de análisis (Juegan las Blancas)

39.Rf6!+– Un método que hay que recordar ya que es muy útil en muchos finales de torre. Se utiliza al peón rival como una especie de escudo (Dvoretsky lo llama "el paraguas") ante los jaques de la torre enemiga.

39.Rf6 Rg8 

Juegan las Blancas


40.Tg7+

Nuevamente otra idea técnica a tener muy presente en nuestras partidas: antes de tomar el peón c, el blanco intercala este jaque para dejar al rey negro peor colocado.

40...Rh8 41.Txc7 Te8 42.Rxf5

Necesario, el peón g y la torre en 7a ante una defensa pasiva no son capaces de ganar.

42...Te4 43.Rf6 Tf4+ 44.Re5 Tg4 45.g7+! Rg8 46.Txa7 Tg1 47.Rxd5 Tc1 48.Rd6 Tc2 49.d5 Tc1 50.Tc7 Ta1 51.Rc6 Txa4 52.d6

1–0

Los aficionados ven esta hermosa maniobra de rey del blanco, comprenden que tan peligroso puede ser un rey activo en los finales y sin embargo, en sus propias partidas, muchas veces se olvidan de activar el rey cuando llega el final. El ejemplo de Capablanca ha producido el conocimiento pero si no se hace un esfuerzo más, este conocimiento no se transforma en "sabiduría". Cuando por fin nuestro conocimiento logra, repito, a base de esfuerzo, transformarse en sabiduría entonces somos capaces de seguir los pasos de nuestros antecesores:
 En este punto habremos dado un gran paso, seremos capaces de lograr relacionar nuestros conocimientos aislados creando vínculos entre ellos:



Muchos creerán que la tarea ha concluido, que el trabajo está listo en esta esta esfera y seguirían adquiriendo otros conocimientos e intentando volver a crear nuevos lazos con los que ya tenían.

Sin embargo, aún faltaría algo. Antes de tener que explicar que tener que simplemente escribir acerca de que es eso que faltaría, es mejor que lo puedan apreciar por ustedes mismos:

Van den Doel,Erik - Leitao,Rafael Duailibe [B52]
Wch U14 Duisburg (11), 1992

Juegan las Negras



30...Rg7!  

No quiero adelantar nada, solo diré en este punto, que es extremadamente interesante la idea del joven Rafael.

Yo sin lugar a dudas hubiese optado - todos los días de mi vida - por la opción de: 30...Rf8 y tras 31.Rf2 jugado 31...Te8 al "grito" de: disculpe, esa torre blanca, tiene mucha columna para mi gusto, haga el favor de cambiarla. La partida terminaría en tablas y yo me iría a mi casa con la conciencia tranquila que no habría mucho más que hacer en la posición del diagrama.

31.Te7  

Esta jugada casi que "la pidió" la anterior jugada negra.

Por supuesto el blanco bien pudo optar por: 31.Rf2 Rf6 32.Rf3 c4 33.g3 b4= y aquí no hubiese pasado nada.

31...Rf6 

Ahora tras:

32.Td7 

Juegan las Negras.

Yo, de ser el rival de Rafael, empezaría a compadecer a la por entonces joven promesa - mientras un pequeño hilo de baba empezaría a correr por mi boca -. Indudablemente pensaría, su técnica es bastante defectuosa. Ciertamente - pensaría para mi mismo - aún tiene serias posibilidades de tablas pero si empezado así a jugar este final, lo más probable es que incluso lo termine perdiendo.

32...Rf5!? 

Era precisamente esta la idea de tras de 30... Rg7. Por supuesto esto no gana, pero da margen muchisimo más grande a su rival para que se equivoque que 30.... Rf8.

La pasiva 32...Tb6 haría las delicias de su rival. 33.Rf2; El negro podría jugar para tablas con: 32...c4 33.Rf2 b4= pero si esta fuera su mejor opción, entonces, su idea de Rg7 y Rf6 indudablemente ha sido un error más no sea desde el punto de vista práctico.

33.Txf7+ 

33.Txd6 Rxf4 34.Tf6+ Re4 35.Txf7 Rxd5.

33...Re4 34.Tf6

Juegan las Negras.


34...Rd3!  

El rey de ningún modo quiere retroceder aún en el caso de que sea comiéndose un peón. 34...Rxd5.

35.Txd6 Rc2 


Ahora el blanco se "despierta" y de repente se da cuenta que la iniciativa está en manos del negro; que en realidad sus peones -los negros- son mucho más peligrosos que los suyos, que el rey negro está pensando en "cenarse" todo el flanco de dama. ¿Cómo ha podido suceder esto? El impacto psicológico de este cambio de escenario en la lucha marcará el destino de la partida.

36.Txg6 Rxb2 37.f5?? 
 
Juegan las Negras


37...c4?! 

¡¡Un muy muy típico error!! Suele suceder que cuando uno de los jugadores empieza a jugar "brillantemente" llega un punto en que lo prosaico - en este caso comerse el peón a- deja ser considerado una opción válida, uno busca seguir con "brillantes" y las jugadas candidatas que no encajen en esta categoría son relegadas.

[37...Rxa2!–+]

38.f6  

38.Rf2

38...b4 39.f7 Tf8 40.cxb4 

Juegan las Negras

40... a4!? 

Las demás también ganan... pero "la brillantes" en este caso sí es la mejor.

[40...axb4 41.Tb6 b3]

41.Rf2 c3 42.Re3 c2 43.Tc6 c1D+ 44.Txc1 Rxc1 45.Rd4 Txf7 46.Rc3 Rb1

0–1

Entonces, ¿qué nos ha enseñado este ejemplo?
Para mi queda claro que una vez obtenida la "sabiduría" en un tema especifico, aún falta un extra más, que no es otra que la creatividad. Con ella podremos "jugar" y crear a partir de la sabiduría adquirida un sin fin de posibilidades, se abriran caminos, elevaremos el nivel de juego ya que nuestro rival se verá enfrentado a problemas nuevos.

 

martes, 16 de junio de 2015

Tal vez que algun día, pero no va a ser hoy...

Puede que no tenga más remedio y en el futuro, espero que lejano, deba dar el brazo a torcer y no tanga otra cosa que admitir que la colosal obra de Roberto Grau "Tratado General de Ajedrez" ha quedado caduca. Que ya está bien, que esta serie, de lo que una vez fueran excelentes libros de aprendisaje, ya ha sido superada totalmente por el tiempo y que ahora deberá pasar a la categoría de puramente historicos. Puede, ciertamente que esto acontezca, pero no será hoy ni tampoco esta semana. Diversas personas que admiro ya han dado este paso - catalogarlo como puramente historico - allá ellos; no voy a polemizar y tampoco negar que ciertos temas y visiones allí expuestas no se han mantenid . Sin embargo, aún siento que esta serie, pero sobre todo la forma de escribir del autor -mucho más allá de lo allí escrito- me sigue pareciendo excelentemente didactica.


En el capitulo VII de su tomo IV, el maestro comienza diciendo:





   "Desde que la escuela clásica de Steinitz transformó el ambiente magistral, desde que Ta­rrasch convirtió la técnica en el secreto básico del juego, hay un problema que, no obstante los años, no ha sido definitivamente resuelto. No se trata ya del valor de las piezas, sino de algo menos tangible y tanto o más poderoso. Debemos encarar la lucha entre sí de dos de los más preciados factores estratégicos de toda la partida. De un lado, posesión de columna abierta, ven­taja incuestionable en muchas posiciones; de otro, posesión de un punto fuerte en el centro del tablero, justo en la casilla desde la cual un caballo sostiene el peón base atacado por el rival.
   Hemos enunciado así el combate entre la columna
"f' abierta, horizonte de un sinnúme­ro de partidas, y la cesión del cuadro "e4" (o "e5") al adversario, para que en él ubique un caballo que desde ese punto focalizará el cuadro "f2 (o "f7) propio, donde habitualmente se encuentra un peón agredido por las torres.
    Pero no es esta, en realidad, la única compensación por la columna abierta, ya que no se­ría muy amplia. La verdadera compensación radica en la extraordinaria acción de un caballo centralizado que actúa como un abanico sobre ocho cuadros vitales del tablero y, por extensión, indirectamente sobre cada uno de los cuadros que desde su futura ubicación puede dominar."


Tal vez, por ser jugador de 1.d4, tal vez por aborrecer los ataques al estilo Kamikaze de la india de rey; no lo sé, pero este capitulo siempre me ha gustado mucho. Las dos partidas de Guidmar quedaron grabados en mi memoria como verdaderos modelos de cómo castigar a las negras.

Es por todo que si encuentraba alguna partida con este tema, ella siempre - o casi, dependiendo de que tan buena fuera - terminaba en mi cuaderno original.

Puesto a mirar las partidas de Bobby Fischer, creo haber visto casi todas ellas, en su momento encontré esta donde se presenta el tema en cuestion: 


Wexler,Bernardo - Fischer,Robert James
Mar del Plata Mar del Plata (1), 29.03.1960
[Ifrán,Maximiliano]


12...Nxe2+

¡¡¡Momento!!! que nadie se mueva, que nadie se atreva siquiera a respirar. ¿Cómo puede ser posible?
Perdón, permítanme que me explique mejor: Esta partida figura en mi cuaderno original mucho antes de mi encuentro con Marcelo Moreira.... ( http://elcuadernodeajedrez.blogspot.com/2012/02/los-genios-aprenden-de-los-errores.html). Por Dios que bruto puedo llegar a ser!! ¿Cómo puede ser posible que no haya aprendido - en este momento, con esta partida - que este cambio es bueno para el negro? Respuesta: sencillo, no presté suficiente atención y hay ciertas cosas que uno aprende sólo luego de cometer los errores - en mi caso, como quedó demostrado en el citado post, varias veces-.

13.Dxe2 f5! 14.exf5  

En caso de 14.f3 f4 15.Af2 Nf6, el negro tiene la iniciativa pese a lo que digan los motores… A ellos nadie les da mate, en cambio a nosotros sí.


14...Nf6 15.Nd3 Axf5 


Hemos arribado al tema tratado por Grau. Las blancas poseen el dominio de la casilla e4, sin embargo por el buen control de las negras de esta casilla aún no la pueden utilizar. Si pretenden hacerlo, no tienen más opción que avanzar su peón f y esto dará a Bobby contrajuego. La posición se vuelve muy interesante desde el punto de vista posicional.

16.f3 De8 17.Nf2 Dg6 18.Nfe4  

En caso de que sea el otro caballo el que caiga sobre e4: 18.Nce4 las negras continuando con 18...h5!? tienen una muy buena iniciativa.

18...g4 19.Tfe1?!  

No me gusta en absoluto esta idea. La explicación puede ser que el blanco desease utilizar su otro torre para presionar en la columna c, o defender su peón d5 en caso de que pueda avanzar con c4–c5. De cualquier manera es una imprecisión. La lucha, actualmente está centrada en el centro y flanco de rey; por lo expuesto era más lógico concentrar las piezas en este sector.

Mejor, a toda luces parece: 19.Tae1.

19...gxf3 20.gxf3 Nxe4 21.Nxe4  

21.fxe4? Ag4 22.Dd3 h5–+

21...Dh5 22.Tac1 b6 

La "más dura". Ahora al blanco le costará real trabajo generar el deseado contrajuego.

23.Tc3 a5  

Nuevamente, Bobby está controlando la situación en el flanco de dama antes de emprender acciones en su flanco fuerte.

24.b3 Tf7 25.a3 Taf8 26.Tf1? 

Error, más conocido como "blunder" o "colgada".

El blanco, quien está en serios problemas debió de optar por sufrir tras: 26.Dd3 donde el negro tiene muchas maneras de desplegar su iniciativa. 26...Ag6 (26...Ah7!?) 27.Te3 Af6 (27...Df5) 28.Nxf6+ Txf6 29.De2 Dg5.

26...Ag4–+ 27.fxg4  

27.Tf2 Axf3 28.De3 Dg4 29.Nd2 e4–+.

27...Txf1+ 28.Rg2 Dg6 29.Af2 Ta1 30.Te3 Tf4 31.h3 h5 32.g5 Txa3 33.Ag3 Txe4 34.Txe4 Txb3 35.h4 a4 36.Af2 a3 37.c5 Tb2 38.Df3 a2 39.Ta4 e4! 40.Da3 Df7

0–1