La influencia del estilo en la toma de decisiones.

Vidmar,Milan Sr - Alekhine,Alexander

San Remo, 1930

[Ifrán,Maximiliano]

 

 En sus análisis a esta partida Alekhine escribía: 

Desde ahora, la dificultad para las negras consiste en tener demasiadas continuaciones que llevan al buen fin, y por eso no es fácil decidirse por una que fuese mejor.

 Juegan las Negras

 Ejercicio: Intente lograr una estado de concentración lo más similar a una situación de torneo y luego, piense como continuaría usted.

 16...Af5!?

Así como sigue el juego, consiguen las negras, con un plan táctico interesante primero logran ganar un peón y luego la calidad; pero las blancas mantienen todavía, casi hasta el final, las oportunidades de tablas. A causa de esto, hay algo débil en el método de las negras para dar valor a su ventaja. Es muy probable que el camino racional no consista en el avance del alfil sino en el ensanchamiento de las ventajas ya existentes; la mayoría en el flanco de dama y, especialmente, la debilidad de casillas blancas en el campo enemigo.

Por esto la jugada del alfil debía ser remplazada por la variante sencilla 16...Cxc4 17.Dxc4 Ae6 18.Dc2 Db5! , etc, a pesar de lo cual las blancas conseguirían llevar su Rey a lugar seguro.

Ifrán:  

Con su elección, el negro desafía y pone en tela de juicio el famoso dicho popular: "más vale pájaro en mano que ciento volando".

Muchos autores han hecho hincapié, en la tendencia que tenía de joven Alekhine, de resolver los problemas de la posición con métodos combinativos. Aquí podemos observar, que a pesar de estar en la cima de su poderío ajedrecístico, este instinto seguía jugando un papel predominante, en su forma de encarar las posiciones.

¿No tienen la sensación, que si fuera Capablanca el jugador de negras, hubiese elegido 16... Cxc4, de forma casi segura?

Y ya que estamos, particularmente me encantaría saber como resolvería esta posición el GM Andrés Rodríguez. Puesto que tengo la impresión, de que él también elegiría continuar la partida con una jugada como 16... Af5.

Debe de tenerse muy presente, que el estilo sólo debe guiarnos, en caso enfrentarnos, con una selección de opciones de un valor bastante similar.

Un ejemplo puede ser el siguiente:

En la posición de este diagrama existen muchas maneras más o menos similares de continuar.

Anatoli Karpov, durante toda su carrera ha preferido en este momento la continuación 9.Cf3
Mientras que Garri Kasparov se ha inclinado por los planes con 9.Cge2.

Ahora bien, si existe una jugada muy superior a las demás, ya no importará el estilo propio, debemos de optar por la mejor, lleve esto a un juego extremadamente agudo o una continación meramente técnica.

Por ejemplo, en la posición siguiente, sólo hay una jugada correcta:

 Juegan las Blancas.

 Tanto, Kasparov, Karpov, usted o yo deberíamos jugar Cxd5.

Ahora, volvemos al ejemplo de Alekhine:

Un hecho interesante de destacar: a esta jugada, Af5, -en el libro del torneo- se la acompaña de un símbolo de exclamación. Añadiendo: "Las negras comienzan a explotar sus posibilidades combinativas."

17.Dxf5

[17.e4 Cxe4 18.fxe4 Axe4 seguido de Axg2.]

17...Cxc4 18.Ac1 Tfe8

[18...Tad8 19.Txd8 Txd8 20.Ce2 Cd5 21.Dd3]

19.Rf2 Te6 

20.Ch3 Ce4+

Ifrán: Probablemente la idea, -complemento de la jugada anterior-, que sedujo a Alekhine, a tomar la decisión de jugar 16... Af5.

21.Re1 Ced6 22.Dd3 Cxe3! 23.Axe3 c4 24.Dd5 Txe3+ 25.Rf2 Dxd5 26.Txd5 Td3 27.Txd3 cxd3 28.Td1 Cc4 29.Txd3 Cxb2 30.Tb3 Cc4 31.Txb7 Cxa3 32.Cg5 a5 33.Cxf7 a4 34.Cd6 Cc2 35.Tb2 a3 36.Txc2 a2 37.Txa2 Txa2+ 38.Rg3 Rf8 39.h4 Re7 40.Ce4 h6 41.Cf2 Re6 42.Cd3 Rf5 43.Cf4 Ta4 44.Cd3 Tc4 45.Cf2 Tc6 46.Ch3 Re5 47.h5 Tc2 48.Cf4 Td2 49.Ch3 Rd4 50.Cf4 Re3 51.Ce6 Td5 52.f4 Tf5 53.Rg4 Tf6 54.f5 Tf7 55.g3 Re4 56.Cc5+ Rd4 57.Cb3+ Re5 0–1

Para concluir, quisiera decir: que si bien, -por lo general-, suele ocurrir que los ajedrecistas, con el paso de los años, intentan evitar el juego agudo que implique muchas variantes a calcular y optan por la búsqueda de algo más tranquilo, esto no hace otra cosa que deformar su toma de decisiones. Al priorizar nuestros deseos por encima de los requerimientos de la posición estamos cometiendo un grave error.