Los siguientes comentarios de Taimanov a una de sus partidas, bien valen más que muchos artículos que he leído. Espero que puedan extraer tanto de ellos como yo lo hice. Las negritas van por mi cuenta en aquellos pasajes que me parecen dignos de destaque:
Taimanov,Mark E - Witkowski,Stefan [A29]
Dresden (4), 1959
Ya en estas primeras jugadas que definen la Apertura Inglesa, se siembra el germen de un conflicto de principios de planteo, de un choque de dos distintos métodos de jugar la fase inicial de la apertura.
La "escuela clásica de Steinitz", cuyos principios en esta partida defienden las negras, enseña: "Ocúpese el centro con piezas y peones". La llamada "nueva escuela", cuyos fundadores fueron Reti y Nimzovich, y cuyas ideas siguen aquí las blancas, enuncia: "El dominio del centro puede sustituirse exitosamente con presión de piezas y peones sobre las casillas centrales".
Ambos principios de planteo han pasado la prueba del tiempo y demostrado su bondad.
La opción entre los dos depende mayormente del gusto del ajedrecista y de su estilo de juego. Tal conflicto "de principios" en una partida viva augura un combate de mucha tensión.
3.g3
Detalle característico: Las blancas recurren al desarrollo del alfil por el flanco, desde donde refuerza "el cañoneo" de las casillas centrales.
3...d5
Las negras fieles a su "doctrina" ocupan el centro.
En vez de 3... d5; inmediatamente, se puede jugar primero 3...c6 En tal caso, las blancas pueden agredir los peones avanzados del adversario por medio de 4.Cf3 e4 5.Cd4 d5 6.cxd5 cxd5 7.d3 Ac5 8.Cb3 Ab4 9.Ag2 Kortchnoi - Keres, 24 Campeonato de la URSS.
4.cxd5 Cxd5 5.Ag2 Ce7
El curso de los sucesos puede agradar al blanco que se adelantó a su rival en la movilización de fuerzas. Sin embargo, la maniobra ejecutada por las negras no carece de lógica. Su plan es el de trasladar este caballo a f5; ubicar el otro en c6 y adquirir dominio sólido del puesto fuerte d4.
La alternativa era tratar de mantener el caballo en d5; por ejemplo jugando 5...Ae6 ; pero entonces las blancas desarrollarían sus fuerzas rápida y cómodamente, siguiendo las líneas de la Siciliana en primera mano: 6.Cf3 Cc6 7.0–0 Ae7 8.d4 siendo de importancia el tiempo de más de que disponen.
6.Cf3 Cbc6 7.0–0 g6
La ubicación del alfil en g7, ideada por las negras, no cuadra en el estilo clásico que eligieron para encarar esta variante.
Más consecuente hubiera sido 7...Cf5 . Así jugó Flohr (frente a Simagin) en el Campeonato de Moscú de 1953; siguió 8.b4 a6 9.Ab2 Ae7 y las negras pudieron terminar el desarrollo del flanco de rey sin inconveniente.
8.b4
Con ventaja de desarrollo, esta acción es justificada.
8...Ag7
Por supuesto, era malo jugar 8...Cxb4 9.Cxe5 , cambiando un peón central por uno de flanco.; Haremos notar que también hubiera sido censurable la jugada defensiva 8...a6 . Existe una regla general que vale la pena seguir: no debilitar la formación de peones propios en el sector del tablero donde el adversario está preparando un ataque. En el caso presente se continuaría con 9.a4 Ag7 10.Aa3 0–0 11.b5 con ventaja de posición.
9.b5 Cd4 10.a4 0–0 11.Aa3
Las negras emplazarán sus piezas conforme con el principio de centralización, el caballo en d4 es el orgullo de su posición. Las blancas, que se advinieron a concesiones en el centro, lograron en cambio desarrollar acciones en el ala dama y sus alfiles "de largo alcance" apuntan a través de todo el tablero.
¿Quién tiene las mejores probabilidades en el combate por venir? Son las blancas las que tienen la iniciativa en este momento; pero la posición negra es suficientemente sólida y no ocasiona temores.
El destino de la lucha está por delante.
11...Te8 12.Cg5
Maniobras de piezas: táctica usual del bando que carece del centro de peones. La intención es Cg5-e4-c5; y de paso se crea la amenaza 13.e3 Cdf5 (13... Ce6 14.Ce6 Ae6 15.Ab7) 14. Db3. Con la jugada siguiente, las negras toman sus medidas.
12...Tb8 13.Tc1 h6
De por sí esta jugada no es mala, pero como se verá, las negras inician con ella un plan equivocado que agrava su situación.
14.Cge4 f5
Las negras solamente mandan el caballo a donde quería ir. El intento de juego activo resulta prematuro a esta altura.
Lo correcto era jugar cautelosamente 14...b6 con la continuación probable 15.Axe7 Txe7 16.e3 Ce6 17.Cd5 Td7 (17...Dxd5 18.Cf6+) 18.Cb4 Ab7 19.Cc6 Axc6 20.Txc6 y la partida negra es muy jugable.
15.Cc5 b6
Las negras insisten en llevar a cabo su plan malogrado; mejor habría sido 15...Rh7.
16.Ca6 Axa6 17.bxa6
Ambos adversarios buscaban esta posición: claro está, apreciandola cada uno distintamente. Las negras cifraban sus esperanzas en la centralización de sus fuerzas, mientras que las blancas confiaban en el factor dinámico de la buena cooperación de las suyas. Indiscutiblemente, el caballo negro está magníficamente ubicado en d4 y sus peones fiscalizan casillas centrales. No obstante, mientras las demás piezas quedan sin acción, el éxito de las centralizadas resulta insuficiente para compensar, por la gran actividad de las blancas, que crean amenazas en el flanco dama.
17...c5
Si no, resultaría muy molesta 18.Cb5. Pero se crea un nuevo blanco de ataque para el adversario: la cadena de peones negras a7-b6-c5.
18.a5
¡Lo ilusorio de las apariencias! La línea bien formada de peones negros resulta, de repente, objeto de ataque de los aislados infantes blancos: los peones blancos de a5 y a6 se vuelven formidables. Es patente que a las negras no les conviene efectuar la captura bxa; por lo tanto, las blancas, en un momento oportuno, realizaran el cambio en b6 colocando a su adversario ante una desagradable alternativa: o bien retomar con una pieza, rompiendo su cadena de peones, o bien retomar con un peón, en cuyo caso el peón a6 se hará temible.
18...e4
La mejor chance. Aunque fuera por algún tiempo, vale la pena restringir la acción del alfil de g2.
19.d3?
Uno de los grandes peligros que acechan hasta los ajedrecistas muy experimentados es el atractivo de las llamadas jugadas "lógicas". La replica 19.d3 parece algo muy lógico contra 18... e4. Sin embargo, por sus implicaciones tácticas, resulta prematura y hasta errónea.
Lo correcto era 19.Tb1 , aumentando la presión. Amenazando 20.axb, ó 20. Da4 o bien 20.e3, las blancas lograban clara ventaja.
19...Cd5!
Un lance muy astuto, cuya fuerza fue subestimada tanto por las blancas como .... ¡por las negras!
20.Cxd5 Dxd5 21.axb6 axb6 22.Ab2 Da2 23.Axd4 Axd4 24.dxe4 fxe4 25.e3 Ag7
Ambos rivales consideraron forzada esta serie de jugadas y las efectuaron con ritmo rápido. Las negras esperaban aliviar su defensa por medio de las simplificaciones realizadas y consideraban que los proverbiales alfiles de distinto color harían más probable el empate.
Las blancas, por su parte, entraron de buena gana en esta línea forzada, teniendo buenas razones para suponer que, dada la debilidad de la posición del rey negro, el hecho de quedar alfiles de distinto color haría más fácil la conducción del ataque.
El curso de la batalla mostrará que esta opinión era acertada, y por lo tanto el lector tiene derecho a reprocharle al comentarista la falta de lógica en sus comentarios: ¿cómo se explica, entonces, que la jugada 19.d3, que llevó forzadamente a clara superioridad de las blancas, mereció el signo de interrogación?
He aquí la razón: la serie de jugadas, desde la 19 hasta la 25, que ambos contrincantes durante la partida consideraban obligada, no lo fue en efecto...
Es que, después de 21.axb, las negras no estaban obligadas a replicar con 21.... axb (¡otra jugada "lógica" y "evidente"!); sino que podían jugar 21... Da2! 22.bxa Ta8. En vista de las amenazas 23... Da3 y 23.... Cxe2 las blancas tendrían que conformarse con entrar en la variante 23.Ac5 Ce2 24.Rh1 Cc1 25.Dc1, en cuyo caso si bien no deben perder, ya no pueden pensar en ganar.
Es curioso que no sólo los dos adversarios no se dieran cuenta de esta posibilidad táctica de las negras, sino que tampoco la vieron varios comentaristas al analizar la partida.
¡Aquí se ve el valor de las jugadas "evidentes"!
26.Dg4 De6
Si 26...Dxa6 27.Axe4 g5 28.Df5 , las negras se liberaban del molesto peón pasado blanco, pero irían de mal a peor, pues su rey quedaría indefenso.
27.De2
En el momento de cristalización de la ventaja posicional es preciso imponerse a si mismo un gran esfuerzo y no dejarse seducir a hacer jugadas buenas en vez de las mejores.
Era atrayente, a esta altura la continuación 27.Dxe6+ Txe6 28.Tc4 . Sin embargo, seguía 28...Tbe8 y las blancas enfrentan el peligro de perder parte considerable de su ventaja lograda, puesto que se simplifica la posición y aumentan las chances de tablas por los alfiles de distinto color.
Manteniendo las damas en el tablero, la conducción de la defensa se hace más difícil para las negras, visto que el combate se librará en ambos flancos: en el de rey, donde hay debilidades en la posición del enroque negro; y en el de dama, donde las blancas cuentan con un peligroso peón pasado.
27...Dc6
Las blancas amenazaban 28.Db5 o 28.Tc4
28.Dc4+ Rh8 29.Tfd1
Las blancas, fatalmente, acumulan ventaja, y ya no está lejos el momento en que las negras no aguantarán más la presión.
29...Te7
Las negras quieren evitar la irrupción de la dama blanca en f7, pero esta jugada es ya demasiando pasiva.
Más tenaz era 29...b5 30.Dxc5 Dxa6 ; aniquilando por lo menos a un enemigo peligroso; sin embargo sigue 31.Td6 y las blancas igualmente deben ganar.
30.Tc2 Te5
Inútil, pero ¿qué puede oponerse a la amenaza de doblar las torres en la columna de dama?
31.Tcd2 b5 32.Df7 De8 33.a7 Ta8 34.Db7 Te7 35.Td7
También es suficiente 35.Dxa8 Dxa8 36.Td8+ Te8 37.Txa8 Txa8 38.Td7 etc.
35...Af6 36.Txe7 Axe7 37.Td7
Lindo ejemplo de la explotación de una columna abierta para dominar la séptima línea, según el famoso principio de Nimzovich.
37...Af6 38.Axe4 b4 39.Th7+ Rg8 40.Ad5+ Rf8 1–0
me gustaria ver la partida que taimanov gano a karpov analizada en todo detalle
ResponderEliminar